Perdimos, otra vez perdemos una final contra Peñarol.
No pudimos ganarles ni aunque les faltaran dos titulares indiscutidos, ni aunque después quedaran con uno menos, ni aunque no les cobraran un penal clarísimo.
No pudimos futbolísticamente, ni anímicamente.
No hubo ni volumen de juego, ni huevos, no hubo nada.
Teníamos que ganar y por un rato lo logramos, aunque fuera de casualidad en la única llegada que tuvimos en el primer tiempo.
Pero después, como siempre, de atrás nos empataron y como ya nos habían ganado el anterior, se terminó la cosa.
Pero lo terminamos de perder ayer, lo empezamos a perder hace meses, cuando nos sacaron 16 puntos de ventaja.
Si trato de ser objetivo, está bien, somos históricamente el segundo mejor equipo del Uruguay, y tenemos tradicionalmente en segundo lugar asegurado.
Somos el segundo equipo más viejo, el segundo equipo más ganador, los segundos, a todo segundos, por eso a nadie puede extrañar que saliéramos segundos.
Ellos hacía 6 campeonatos que no salían campeones, y nos burlamos, pero la verdad: en esos 6 años ganamos un sexenio, o un quinquenio ? no, no pudimos, apenas pudimos ganar 3 veces en esos 6 años que ellos estaban mal.
Perdimos la oportunidad preciosa de tener otro quinquenio e igualarles, pero no hay caso, no podemos igualarlos nunca, siempre vamos un par de pasos atrás.
Ahora nos regresaron de un golpe a nuestro lugar de segundones.
No tiene caso llorar, ya está, en nuestro destino ser segundos cuando ellos están bien, y conformarnos con las sobras, ganando cuando ellos no están.
Nos ganaron bien en la cancha, nos dieron una paliza en las tribunas, como siempre, éramos 4 que ni atinábamos a cantar. Estábamos muertos, ni siquiera cantamos.
Lo único que nos queda es tratar de desviar la atención hablando de que rompieron un kiosko en 18 de julio, o decir "soy más bolso que nunca", lo que es una gilada.
Los hinchas de verdad son hinchas al 100% siempre. Sólo nosotros somos más hinchas al salir segundos, como aceptando que es ése nuestro lugar.
Qué triste, estuvimos tan cerca de la hazaña de ganarles una final...
Pero no hay caso, jamás podremos.
No pudimos ganarles ni aunque les faltaran dos titulares indiscutidos, ni aunque después quedaran con uno menos, ni aunque no les cobraran un penal clarísimo.
No pudimos futbolísticamente, ni anímicamente.
No hubo ni volumen de juego, ni huevos, no hubo nada.
Teníamos que ganar y por un rato lo logramos, aunque fuera de casualidad en la única llegada que tuvimos en el primer tiempo.
Pero después, como siempre, de atrás nos empataron y como ya nos habían ganado el anterior, se terminó la cosa.
Pero lo terminamos de perder ayer, lo empezamos a perder hace meses, cuando nos sacaron 16 puntos de ventaja.
Si trato de ser objetivo, está bien, somos históricamente el segundo mejor equipo del Uruguay, y tenemos tradicionalmente en segundo lugar asegurado.
Somos el segundo equipo más viejo, el segundo equipo más ganador, los segundos, a todo segundos, por eso a nadie puede extrañar que saliéramos segundos.
Ellos hacía 6 campeonatos que no salían campeones, y nos burlamos, pero la verdad: en esos 6 años ganamos un sexenio, o un quinquenio ? no, no pudimos, apenas pudimos ganar 3 veces en esos 6 años que ellos estaban mal.
Perdimos la oportunidad preciosa de tener otro quinquenio e igualarles, pero no hay caso, no podemos igualarlos nunca, siempre vamos un par de pasos atrás.
Ahora nos regresaron de un golpe a nuestro lugar de segundones.
No tiene caso llorar, ya está, en nuestro destino ser segundos cuando ellos están bien, y conformarnos con las sobras, ganando cuando ellos no están.
Nos ganaron bien en la cancha, nos dieron una paliza en las tribunas, como siempre, éramos 4 que ni atinábamos a cantar. Estábamos muertos, ni siquiera cantamos.
Lo único que nos queda es tratar de desviar la atención hablando de que rompieron un kiosko en 18 de julio, o decir "soy más bolso que nunca", lo que es una gilada.
Los hinchas de verdad son hinchas al 100% siempre. Sólo nosotros somos más hinchas al salir segundos, como aceptando que es ése nuestro lugar.
Qué triste, estuvimos tan cerca de la hazaña de ganarles una final...
Pero no hay caso, jamás podremos.
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