No conforme con hacer lo imposible para que Peñarol no pueda construír su estadio, nuestro vice presidente de la República, el inefable segundón Danilo Astori provoca a la hinchada aurinegra cada vez que puede.

Terminado el partido entre Uruguay y Bolivia, a la salida se le pidió su opinión, y no tuvo reflexión más inteligente que decir: "me encanta que los goles los hagan jugadores de Nacional"...
Más allá de que los que hicieron los goles fueron Lugano, Suárez y Cavani, que ni fueron todos jugadores de Nacional (hoy ninguno lo es), ni son todos hinchas tricolores, lo que llama la atención es lo poco oportuno de estas declaraciones. Olvida que en no mucho tiempo andará mendigando votos de gente a la que ahora provoca sin razón ni necesidad.

Astori, recordemos, es un típico ejemplar de la gallina del Uruguay.
Eterno segundón, ha querido ser presidente en dos ocasiones, pero como buen bolso está acostumbrado a salir segundo.
Salió segundo cuando compitió contra Tabaré Vazquez, y volvió a salir segundo al intentarlo contra Mujica.
Como acostumbran las gallinas del parque, a falta de logros propios intentan apropiarse de los ajenos.
Se llenan la boca con Uruguay y la celeste, pero el único objetivo es adueñarse de una fiesta que es de todos.
Recordemos hace poco el papelón internacional utilizando la camiseta celeste, por citar un ejemplo apenas.

Seguirá feliz, ocupando su segundo lugar, deportiva y políticamente hablando, aprovechando que la gente lo puso en un cargo con algo de poder para seguir poniendo los intereses de su institución por encima del interés general, para seguir poniendo palos en la rueda a sus adversarios deportivos, y haciendo comentarios infelices cuando le pongan un micrófono enfrente, no puede esperarse otra cosa.
Seguramente así ganará muchos votos y para las próximas elecciones dejará de ser segundo... (o no?)